¡Hola familias!
¿Cómo estáis llevando el confinamiento? Imagino que como todos… como podemos, cada cual con sus propias circunstancias, dramas y alegrías… pero todos tenemos algo en común, estamos deseando que esto acabe cuanto antes, y aunque pensemos que no contamos los días al final todos sabemos cuantos llevamos…
Hoy abro esta entrada para homenajear a la casa de todos, sí… es grande, luminosa, llena de plantas y flores y en este ultimo mes esta más limpia que nunca. Hablo de la TIERRA, hoy es su día, y nosotros debemos poner el foco en ella, y más ahora que nos hemos dado cuenta de lo importante que es tener la casa limpia y ordenada, aunque aquí con dos niños en casa más de un mes, está siendo todo un reto.
Si podemos sacar algo positivo de todo esto, sin duda me quedo con las noticias que nos llegan sobre la contaminación, al parar la actividad humana ha parado en seco la contaminación, en las ciudades bajan los niveles de dióxido de carbono, aguas que vuelven a estar limpias, animales tomando espacios donde antes solo había humanos… en definitiva estaréis de acuerdo en que esto le ha dado a la tierra un buen alivio… y como mínimo nos tendría que dar para reflexionar, y pensar en que podemos seguir haciendo cuando esto pase, como podemos no seguir empeorando el estado de salud de la Tierra, como podemos no ser el virus que la mate a ella.
A pequeña escala podemos hacer muchas cosas, muchas mas de lo que nos imaginamos, creo que todos sabemos ya la importancia de consumir menos plásticos, y de que los que se consuman sean reciclables, de rehusar más, de aprovechar muchísimo todas las cosas que tenemos, en definitiva, tener un consumo responsable, pero esto se puede completar utilizando el sentido común a la hora de comprar y donde comprarlo. La economía de cercanía y circular es algo que debemos empezar a implementar en nuestro día a día, preguntarnos de donde proceden las cosas que compramos y usamos para ser conscientes de si estamos ayudando o si estamos empeorando la situación. En estos días nos estamos dando cuenta, a raíz del cierre de las fronteras que podemos abastecernos sin necesidad de importar tantísimas cosas, haciendo uso de los pequeños comercios locales que son los que están trabajando duramente para que no nos falte de nada. Espero que cuando todo pase no se nos olvide quien estuvo a nuestro lado.
Es importante confiar en empresas que sean respetuosas con el medio ambiente, ahora, más que nunca. Que se preocupen en cada paso de su producción en cómo pueden reducir su huella de carbono, su impacto en el mundo y cómo pueden mejorarlo, no solo a nivel medioambiental si no también socialmente.
Babylobitos nació con la idea de mejorar la vida de mamás y papás protegiendo los pies de vuestros bebes, pero no a cualquier precio. Trabajamos duramente cada día en intentar mejorar el mundo que nos rodea, decidimos no utilizar pieles de animales e intentar encontrar una alternativa ecológica y con menos impacto medioambiental y lo logramos. Decidimos no utilizar plásticos en ninguna parte de nuestro proceso productivo y lo logramos. Decidimos no utilizar abrasivos ni pegamentos y dimos con la forma de hacer el zapatito sin ellos. No utilizamos ningún producto que no sea biodegradable en nuestra fabricación. Y cada día pensamos en cómo podemos mejorar todo esto e ir más allá. Hemos logrado muchas cosas, tenemos que mejorar en otras, pero estamos en ello.
Uno de nuestros caballos de batalla era la economía circular, en el calzado alargar la vida útil cuando se han quedado pequeños es muy difícil, porque no se debe compartir con hermanos o familiares por cuestiones de pisada y formas del pie, y los elementos del propio zapato hacen difícil su reciclaje, dándole vueltas una noche, ya sabéis que las mejores ideas vienen en el duermevela, se me ocurrió que lo que mas nos gusta a los papas y mamas es recordar a nuestros bebes, entonces ¿Cómo podíamos nosotros ayudar en eso?. Convirtiendo los lobitos en llaveros cuando a tu bebe ya no le estén…. ¡IDEAZA!… ya se que esta mal que yo me lo diga a mi misma… pero es la realidad y ante eso ni yo me lo puedo negar. Así que hemos empezado a enviar el “kit llavero” a muchos de vosotros con vuestros pedidos junto con una pequeña explicación de cómo hacerlo, así podremos alargar la vida útil de los lobitos y que vosotros llevéis siempre cerca a vuestros peques… ¿Qué os parece?
En definitiva, la naturaleza, la Tierra, necesitaba un respiro, y afortunadamente lo ha tenido. Podemos ser egoístas y pensar que el coste ha sido alto, pero si la Tierra se muere el coste sería final. Deseo y espero que todos aprendamos a ser más conscientes del reto que tenemos por delante, el de no volver a desaprovechar la segunda oportunidad que tenemos como sociedad y por fin, hacer algo mas que no sea solo hablar.
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¡FELIZ SEMANA!
